No creas... pues llevo en mí la pristina falsedad, ésa, cuya esencia, radica en el dilema entre razón y sentimiento.
O sí, cree,... pues más allá de las sombras mudas, en este teatro de sombras, yo, desde las entrañas, digo.
Letra chica
Aqui solo escribo ficción, y cualquier similitud o coincidencia con la realidad, solo es casualidad. ¿Quien puede decir cuando realidad y ficción se parecen? ¿Cuando coinciden? Yo solo diré que jamás he logrado separar la una, de la otra...
Generalmente, el dilema entre razón y sentimiento es cualquier cosa menos falso.
ResponderEliminarJustamente, como ese dilema es cualquier cosa menos falso, nos condiciona a serlo: Por razones varias, no siempre actuamos según nuestros sentimientos y, hasta a veces, creemos que logramos engañarlos...
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ResponderEliminarAh, es que ellos son muy pertinaces. Por fortuna. Si así no fuera , pues seríamos como ordenadores... ;)
ResponderEliminarCreas o no creas, es cuestión tuya. Yo seguiré siendo el que he sido siempre.
ResponderEliminarSaludos
J.
Yo quisiera creer... mas un designio cósmico me vuelve más viejo, más cauto y menos crédulo.
ResponderEliminarY a pesar de eso, sigo siendo un esclavo de mis sentimientos...
Somos esclavos de nuestros sentimiento incluso sin quererlo.
ResponderEliminarA veces intentamos respaldarnos en la lógica y aferrarnos a preceptos pero al más mínimo movimiento, detalle, gesto ... Nuestros esquemas se desvanecen ....
Si..
Pasa....
Un salud❇
Los sentimientos son lo único verdadero e indiscutible que nos sucede, y que tenemos. No tiene esa suerte la razón que siempre será discutible.
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