De un cielo tan gris, llueve tenue sobre las hojas verdes, ovaladas, alargadas, redondas, puntiagudas, y oscuras, y amarillas, doradas.
Brillan con el agua que desliza sobre ellas, y se cae.
Huele a tierra mojada, como solo huele aquí, y hace frío.
Pienso en aquellas piedras que recuerdo resecas bajo el sol, y las veo, abrasado por el calor, sin haberlas visto.
El tiempo se va.
Cuando vuelva otra vez, quiero que me encuentre con quien no he estado.
Abrazado por esa voz que sueño, y no he oido, cuando despierte.
El agua se cae de las hojas, y del tiempo me caigo yo.
Cuando despierto.
